Las religiosas de las Esclavas del Sagrado Corazón regentan un colegio de infantil y primaria, en un barrio muy deprimido de la ciudad de Sabang, Filipinas, desde 1997. Comenzaron atendiendo y escolarizando a unos pocos niños y en la actualidad están formando a más de 400 niños en diversos niveles. Con mucho esfuerzo han ido extendiendo la educación desde los 3 años, hasta llegar hoy en día a alcanzar hasta 6º de primaria (12 años), dadas las dificultades para conseguir financiación, aunque su proyecto a medio-largo plazo es poder cubrir más cursos, incluyendo educación secundaria.

La población a la que atienden vive en situación de extrema pobreza, con graves carencias y sin acceso a educación. Con este proyecto se facilita el acceso a una educación a más de 400 niños hasta 6º de primaria, con lo que, al menos acceden a aprender a leer y escribir.

El proyecto se lleva a cabo con la colaboración de 6 religiosas, 17 profesores profesionales y la ayuda voluntaria de numerosos padres y madres. 

Para sufragar el coste anual del colegio, la Congregación y la Asociación aportan fondos propios y recaban otros ingresos a través de cuotas de los exalumnos asociados, campañas de sensibilización, y contactos con diversas instituciones privadas, como la Fundación Carmen Gandarias, que también les aportan fondos y con ello se ocupan del pago de las nóminas de los profesores, mantenimiento de las instalaciones, compra de material escolar, manutención de los alumnos (a los niños les dan dos comidas al día), asistencia médica de los niños que no pueden pagarla, y educación y formación general de las familias de los alumnos. La Fundación Carmen Gandarias ha aportado fondos al sostenimiento de la escuela de Filipinas entre 2008 y 2014.